dijous, 24 de març del 2011
PER QUÈ HAN EXPLOTAT ELS REACTORS NUCLEARS DE FUKUSHIMA?
dilluns, 21 de març del 2011
Got, el primer toro bravo clonado
El animal hace honor a su estirpe, y a punto de mudarse de ganadería, ya se arranca a dar las primeras embestidas. Y eso que su destino no será una plaza, sino perpeturar su especie mejorada genéticamente.
Hace unos meses en medio de una enorme expectación conocimos al primer toro clonado de España. Era un experimento que no estaba muy seguro que saliese adelante. Ha pasado casi un año y Got va tomando forma de toro bravo. Eso sí, cuando termine de crecer no le veremos en una plaza de toros, su destino es perpetuar la especie que ha sido mejorada genéticamente.
Le conocimos de recién nacido, en mayo del pasado año. Por aquel entonces este manso ternero no tenía ni por asomo hechuras de toro de lidia. Pero diez meses después el experimento va tomando forma. El astado ya no es tan pequeño, y Got muestra ya maneras de la pura raza brava que lleva en su ADN.
Así que daría mucho juego en una plaza, pero su futuro será otro. Si todo sale bien estaremos ante un codiciado semental que transmitirá su bravura a sus descendientes. El experimento de la Fundación Valenciana de Investigación Veterinaria ha sido un éxito en esta primera fase.
dissabte, 12 de març del 2011
¿Qué es un tsunami?
Las olas del mar normales se generan por las mareas, el viento, las condiciones meteorológicas y las corrientes, mientras que el tsunami se desencadena por algo que provoca un desplazamiento de un gran volumen de agua, como avalanchas de tierra, erupciones volcánicas y terremotos, informan los expertos de la NOAA (Agencia Nacional del Océano y la Atmósfera estadounidense). Son precisamente losterremotos que se producen en las zonas de subducción (donde se encuentran dos placas tectónicas presionando una contra otra e introduciéndose una bajo la otra), donde más típicamente se puede generar un tsunami.
Una vez que se desencadena el tusnami, las olas se desplazan a una velocidad de unos 800 a 1.000 kilómetros por hora, como un avión comercial, aunque es más lento en aguas someras. Sus olas pueden alcanzar los 10 metros de altura al llegar a la costa y son olas que, a diferencia de las normales de mar, superficiales, implican movimiento de toda la columna de agua, hasta el fondo. Y no tiene por qué ser una, sino que pueden ser varias, más espaciadas en el tiempo que las normales: suelen pasar varios minutos entre una cresta de ola y otra, pero a veces puede transcurrir hasta una hora, por lo que la situación de peligro para la población costera se mantiene durante bastante tiempo.
Al acercarse el tsunami a la costa, el agua puede retroceder, retirarse, y a continuación llega el embate de la ola. La gente que regresa a sus casas una vez que ha pasado la primera ola corre un altísimo riesgo de encontrarse con las siguientes, advierten los especialistas. Y no siempre la primera que llega es la mayor, sino que a veces es la quinta o la sexta.
El tsunami no sólo viaja a gran velocidad, sino que puede alcanzar grandes distancias con una pérdida limitada de energía, por lo que puede atravesar todo un océano y golpear en costas lejanas con enorme fuerza.
Los sistemas de alerta de tsunamis aprovechan esas horas que puede haber entre el terremoto y la llegada de las olas gigantescas. Se basan en redes de sensores de presión instalados en el fondo marino y boyas de superficie que transmiten la información sobre la situación del mar, en tiempo real, por satélite. Con esta información y los datos del fenómeno que ha desencadenado el tsunami, el terremoto en este caso (la zona del sismo, el tipo, la profundidad del epicentro, etcétera, con datos esenciales) los especialistas pueden analizar con modelos informáticos el desarrollo de la situación, calcular las horas de llegadas a las diferentes costas y las alturas previstas de las olas. Esa información se pasa inmediatamente a las autoridades responsables de alertar a la población y de tomar medidas ante la catástrofe inminente.
Terremoto en Japón
divendres, 11 de març del 2011
El mayor terremoto registrado en Japón deja ya cientos de víctimas
Un tsunami con olas de hasta 10 metros barre el litoral del noreste del país tras un temblor de magnitud 8,9, el más fuerte en 140 años.- Al menos 184 muertos, según el último recuento, aunque el Gobierno advierte de que hay una cifra "extremadamente alta" de víctimas.- Declarada la emergencia nuclear por problemas en una central
La catástrofe se debe en gran parte a que el fuerte movimiento sísmico, cuyo epicentro se ha localizado en el océano Pacífico a un centenar de kilómetros de la costa, ha desatado un tsunami con olas de hasta 10 metros que han penetrado 5 kilómetros tierra adentro y han arrasado cuanto han encontrado a su paso en las provincias del noreste. Según el ministerio de Defensa, solo en la prefectura de Fukushima hay unas 1.800 viviendas destruidas. Y en la vecina prefectura de Miyagi, una de las áreas más afectadas, la policía ha asegurado que hay entre 200 y 300 cadáveres en una playa de la ciudad de Sendai. Las olas han arrastrado barcos tierra adentro y se teme que cuatro trenes costeros de los que no se sabe nada hayan sido engullidos por el mar. Al menos uno de ellos era un convoy de pasajeros que trasladaba a un número indeterminado de personas cuando se perdió su pista. Los transportes se han visto afectados en todo el país, dejando a numerosas personas sin la posibilidad de regresar a sus casas, y los vuelos en el aeropuerto de Narita, el principal de Tokio, se han visto interrumpidos durante horas.
Con las primeras horas del día en el país, el primer ministro japonés, Naoto Kan, ya ha salido en un helicóptero para sobrevolar las zonas más afectadas y controlar desde el aire la situación en la que se encuentra el país.
TERRATREMOL I TSUNAMI A JAPÓ
dijous, 10 de març del 2011
Explicacion sobre el ADN
dimecres, 9 de març del 2011
CREADO "UN HONGO TRANSGÉNICO" PARA COMBATIR LA MALARIA
El equipo halló que ciertas combinaciones de ellos lograron detener el desarrollo de parásitos causantes de malaria en los mosquitos. En un artículo publicado en la revista Science, los investigadores señalaron que el enfoque podría convertirse en una forma ambientalmente viable de combatir la malaria, y también podría emplearse para controlar otras condiciones transmitidas por gérmenes como la fiebre del dengue o la enfermedad de Lyme.
"Aunque aquí se aplicó para combatir la malaria, nuestro enfoque con hongo transgénico es muy flexible y permite diseñar y administrar productos genéticos personalizados para casi cualquier antrópodo portador de enfermedad", dijo Raymond St. Leger, profesor de entomología de la University of Maryland, que dirigió el estudio.
La infección por parásitos causantes de malaria genera alrededor de 240 millones de casos de la enfermedad en todo el mundo cada año y causa la muerte de más de 850.000 personas, muchos de ellos niños, según la Organización Mundial de la Salud. La mayoría de los casos de malaria se producen en Africa subsahariana, pero la condición afecta a personas de más de 100 países en el mundo.
Tratar los mosquiteros y casas con insecticidas es una de las principales estrategias de prevención, pero los mosquitos pueden desarrollar resistencia a esos insecticidas, lo que vuelve ineficaz a la herramienta preventiva. "Los mosquitos tienen una increíble capacidad de evolucionar y adaptarse, por lo que no habría una solución permanente", dijo St. Leger.
No obstante, el experto añadió que los resultados de este estudio sugieren que hacer que los mosquitos transmisores de malaria porten el hongo genéticamente modificado podría reducir drásticamente la transmisión de la enfermedad a los humanos y brindar un biopesticida efectivo durante algunas décadas.
El equipo de la Escuela de Salud Pública de Johns Hopkins en Estados Unidos y la británica University of Westminster comparó tres grupos de mosquitos que habían sido infectados con parásitos de la malaria y halló que, comparado con otros tratamientos, colocar el hongo transgénico en los mosquitos reducía significativamente el desarrollo del parásito.
El parásito de la malaria se halló en las glándulas salivales del 25 por ciento de los mosquitos portadores del hongo transgénico, comparado con el 87 por ciento de aquellos con una cepa sin modificar del hongo y el 4 por ciento de los insectos a los que no se roció con ningún hongo. "Ahora que demostramos la efectividad de este enfoque (...) nuestro principal objetivo es llevar esta tecnología al campo de los ensayos en Africa lo antes posible"